-.MASTITIS EN VACAS LECHERAS.-
Catedra: Clínica de Animales de Interés Zootécnico
ALUMNA: Sabina Barrios
PROFESOR: Jorge Luis Merlassino
AÑO: 2011
Mastitis en vacas lecheras.
Introducción:
En el presente trabajo se mencionan los
diferentes tipos de mastitis que afectan a nuestros rodeos lecheros, su
tratamiento y control debido a la importancia crucial y al impacto de esta patología
en la producción láctea, ya que son decisivas una buena calidad y eficiencia de
producción en un ambiente altamente competitivo que obliga a los productores a
optimizar sus márgenes de ganancia para subsistir en una economía globalizada.
Definición de mastitis:
La palabra mastitis deriva de griego, donde
mastos significa “mama” e itis “inflamación del”.
Infección intramamaria: la inflamación de
de la glándula mamaria resulta de:
·
Traumatismos o lesiones en la
ubre.
·
Irritaciones químicas o,
·
Infecciones causadas por microorganismos,
especialmente bacterias.
·
La reacción inflamatoria es un mecanismo de
protección para:
ü Eliminar microorganismos
ü Neutralizar sus toxinas, y
ü Ayudar a reparar los tejidos productores de leche para que la glándula
pueda volver a funcionar normalmente.
Formas y prevalencia de la mastitis:
v Mastitis subclinica: es el tipo predominante de
infección intramamaria, si bien no puede ser detectada visualmente, ni en la
ubre ni en la leche, ya que ambas tienen apariencia normal , no es peligrosa
para el tejido mamario o para la vida del animal, pero se puede transmitir a
otras vacas.
Las especies bacterianas asociadas más frecuentemente con esta forma de infección son: staphilococcus aureus, streptococcus uberis
y streptococcus agalactiae.
La mastitis subclinica también es
importante las siguientes razones:
-
Es de 15 a 40 veces más prevalente
que la forma clínica.
-
Por lo general precede a los
síntomas clínicos.
-
Suele ser de larga duración.
-
Puede ser difícil de tratar con
antibióticos.
-
Es
difícil detectar.
-
Reduce marcadamente la producción
de leche.
-
Afecta la calidad de la leche.
-
Sirve como reservorio para
infectar al resto del hato.
Prevalencia de la mastitis subclínica: es el porcentaje de vacas o cuartos con diagnóstico de infección
intramamaria en un periodo dado; muchas veces se lo denomina nivel de
infección.
La prevalencia de la mastitis subclínica se
ve reflejada en el recuento de células somáticas (RCS), una baja prevalencia va
acompañada de un bajo RCS y viceversa. Registros recientes indican que muchos
hatos tienen un RCS superior a 200000/ml, lo que se considera el límite
superior para la leche normal. Un RCS
superior a este valor indica que la vaca o el cuarto están afectados con algún
tipo de microorganismo causante de mastitis.
v Mastitis clínica: esta forma de infección se
caracteriza por anormalidades visibles en la ubre y/o leche, cuya severidad
varia mucho con el transcurro de la enfermedad. Se pueden observar cuartos
enrojecidos e hinchados o bien palparse endurecimientos. En la leche
las anormalidades van desde la presencia de grumos hasta sangre y secreciones
serosas.
La mastitis clínica puede estar causada por
estafilococos, estreptococos o coliformes. En los hatos se han encontrado
mastitis contagiosas, generalmente es por patógenos ambientales.
La mastitis clínica se clasifica a su vez
según el grado de severidad en:
-
mastitis clínica subaguda: es levemente clínica y los síntomas son alteraciones menores en la
leche como grumos, floculo o aspecto descolorido. El cuarto afectado puede presentar
leve hinchazón y sensibilidad al tacto, además de un poco o nada de calor
localizado o enrojecimiento. La vaca no exhibe signos sistémicos de enfermedad.
-
mastitis clínica aguda: se caracteriza por un enrojecimiento repentino, hinchazón y
endurecimiento del cuarto afectado, el cual se hace sensible al tacto. La
leche tiene un aspecto muy anormal,
purulento, seroso, aguachento o sanguinolento, y la producción disminuye.
Los síntomas sistémicos que se pueden presentar son:
aumento de la temperatura rectal, pérdida del apetito, menor actividad,
reducción de la función del rumen, pulso acelerado, deshidratación, debilidad,
temblores, diarrea y depresión.
-
mastitis clínica hiperaguda: es poco frecuente, se caracteriza por atacar
muy rápidamente la glándula mamaria, los síntomas son los mismos que los
enumerados para mastitis clínica aguda pero son más severos, y les agregamos
shock, fibrosis de la ubre, septicemia, perdida de coordinación muscular,
extremidades frías y reducción el reflejo pupilar. Estos casos requieren
atención veterinaria rápida ya que se encuentra comprometida la vida del
animal. La vaca que sobrevive necesita meses para recuperarse y muchas veces el
cuarto afectado queda destruido.
Prevalencia
de la mastitis clínica: la mayoría de los registros
indica de los registros indica que la prevalencia de mastitis clínica oscila
entre el 2 y 5 % del hato del ordeño por mes. La tasa de mastitis clínicas
causadas por patógenos ambientales es alta en los meses calurosos y húmedos del verano.
v Mastitis crónica: es de larga duración y puede
comenzar como las mastitis clínicas o bien como una infección subclinica con
aparición intermitente de episodios clínicos. Los síntomas son: desarrollo
progresivo de tejido cicatrizal, cambio de tamaño y forma del cuarto afectado y
reducción de la producción de leche.
v Mastitis no especifica: también se denomina
mastitis aséptica o no bacteriana y se caracteriza por un aumento del recuento
de células somáticas, sin ser posible la detección del agente causal; este tipo de mastitis puede deberse a:
traumatismos irritación química por los tratamientos y por el funcionamiento
incorrecto de la maquina de ordeñe.
v Mastitis latente: es cuando se aísla un
patógeno importante como streptococcus
aureus o streptococcus agalactiae sin observar el correspondiente aumento
de l recuento de las células somáticas.
Desarrollo de la mastitis:
Para saber como se desarrolla la enfermedad
es necesario tener conocimientos básicos de la anatomía de la glándula mamaria.
La glándula mamaria esta compuesta por
cuatro cuartos, cuarto anterior derecho, cuarto anterior izquierdo, cuarto
posterior derecho y cuarto posterior izquierdo, en el interior de cada cuarto
se compone de la cisterna del pezón, la cisterna de la glándula , numerosos
conductos galactóforos y el tejido secretor, este contiene los alveolos que están
cubiertos por células epiteliales que
producen la leche. Cada alveolo esta rodeado por células musculares,
mioepiteliales, que se contraen y evacuan la leche durante el ordeño.
¿Cómo se produce la invasión en la ubre?
|
Establecimiento de la infección.
La capacidad que tienen las bacterias de
adherirse a los tejidos que recubren el interior de la glándula mamaria influye
sobre la probabilidad de permanecer infectado; las bacterias como Streptococcus agalatiae y staphylococcus
aureus han demostrado buena adherencia a los tejidos que recubren el interior del pezón y las cisternas de la glándula.
Otros microorganismos como Escherichia coli no se adhieren tan
bien, pero se multiplica rápidamente en los cuartos con bajo RCS.
La interacción de las bacterias con los leucocitos
(células somáticas) también influye en el establecimiento de la infección. Una
de las funciones de estas células es de fagocitar y matar las bacterias. Si
estos microorganismos son eliminados la infección desaparece, pero si algunas
bacterias sobreviven en el cuarto afectado se produce una inflamación crónica
con alto RCS que puede persistir por meses o años.
Inicialmente, las bacterias se ubican en los
tejidos que recubren al pezón y las
cisternas glandulares, y en los conductos grandes. Luego ingresan a los
conductos mas delgados y a las áreas de de producción de leche de la zona baja
de la glándula afectada alcanzando los alveolos.
Las bacterias causan daño por la producción
de toxinas, que provocan hinchazón y muerte de las células productoras de
leche. Como consecuencia se liberan sustancias que inician la respuesta
inflamatoria, ya que atraen a los leucocitos al área de infección para destruir
a las bacterias.
Así mismo aparecen fluidos y coagulantes de
la sangre para diluir las toxinas
bacterianas y reparar los tejidos dañados, lo que causa inflamación local.
Inflamación mamaria: la respuesta inflamatoria se produce por el ingreso de leucocitos y
fluidos desde la sangre; la inflamación puede ser leve y no ser detectada por
el ordeñador o puede producir signos clínicos evidentes que pueden variar. Las
mastitis subclínica aumenta leve a
moderadamente el RCS. Una inflamación severa con mastitis clínica provoca un
movimiento masivo de leucocitos hacia la glándula. Según el grado de severidad
de la infección estos cambios pueden ser acompañados por edemas, enrojecimiento
e inflamación con secreciones anormales aguachentas que contienen fibrina,
grumos y glóbulos rojos.
Respuesta tisular a la infección: luego de migrar a través de los vasos sanguíneos, los leucocitos
atraviesan el tejido secretor hacia el área infectada, acumulándose alrededor
de los alveolos, conductos y cisternas antes de ingresar a la leche. Algunos
leucocitos migran penetrando por entre las células secretoras intactas y
liberando enzimas que las destruyen o inhiben la síntesis de leche. Esto es
causa de merma de producción por mastitis.
Microorganismos
causantes de mastitis.
Más de 140 microorganismos diferentes
pueden causar mastitis y todos proliferan en la vaca o en su entorno. Por eso
se dice que la mastitis es el resultado de la interacción entre la vaca, el
ambiente y los microorganismos. Se trata
de bacterias, micoplasmas, levaduras, algas, hongos y rara vez virus, de todos
ellos las bacterias son la mayor causa de infección intramamaria en vacas lecheras.
Los patógenos causantes de mastitis se
agrupan en cuatro categorías:
Contagiosos: se
transmiten de cuartos infectados a cuartos sanos, se transmiten de una vaca a
la otra durante el ordeño, por las manos del ordeñador y los paños para limpiar
la ubre.
Ambientales:
provienen del medio en que vive la vaca. Ingresan a la ubre entre los ordeños
cuando los pezones están expuestos a barro, heces y cama sucia. La mayoría de
los patógenos y de los ambientales producen un alto RCS y se los denomina
patógenos mayores.
Oportunistas:
son los mas prevalentes, si bien causan una leve infección, prosperan en la
superficie de la ubre y de los pezones en gran cantidad por lo que son una fuente
constante de infección intramamaria. Son los denominados patógenos menores.
Otros: son
menos comunes de producir mastitis como hongos,
virus, levaduras y algas.
Infecciones especificas por patógenos
comunes.
Las bacterias que más comúnmente causan
mastitis son estreptococos, estafilococos y coliformes. Estas bacterias
originan infecciones subclinicas de
larga duración, muchas veces llamadas infecciones crónicas, con presencia de
abundantes microorganismos en la leche.
Streptococcus
agalactiae: estas bacterias infectan
principalmente el sistema de conductos de la porción inferior del cuarto
afectado, sin embargo pueden dispersarse y causar daño al tejido secretor de
toda la glándula. La transmisión de streptococcus
agalactiae a cuartos sanos sucede principalmente durante el ordeño. Si la
higiene de la ubre es ineficiente y las medidas de control inefectivas este microorganismo puede dispersarse rápidamente por todo el lote. El
ordeño incompleto de cuartos infectados aumenta la severidad de la mastitis,
porque queda una gran cantidad de bacterias en el cuarto infectado, que luego
contagiaran a otras vacas.
Los cuartos infectados con streptococcus agalactiae tienen un alto
contenido de células somáticas, lo que eleva marcadamente el RCS del tanque.
Como signo clínico se observa el cambio de coloración en la leche. Este
microorganismo es sensible a la penicilina y puede ser erradicado en algunos
hatos lecheros. Las infecciones subclinicas pueden volverse crónicas cuando
falla el tratamiento quedando cuartos no funcionales o ciegos.
Staphylococcus
aureus: estas bacterias son más dañinas para los
tejidos productores que streptococcus
agalactiae, porque liberan más
toxinas perjudiciales. Inicialmente las bacterias dañan los tejidos que
recubren las cisternas del pezón y glandulares, luego migan al sistema de
conductos y formas bolsas (nichos) en los tejidos secretores. Este proceso es
seguido por formación de abscesos y tejido cicatrizal que envuelve a las
bacterias; este recubrimiento es un mecanismo de defensa muy útil para aislar a
las bacterias y mantenerlas localizadas, por un lado, la formación de tejido
cicatrizal tiene como consecuencia una baja respuesta a los antibióticos porque
no entran en contacto con las bacterias, la infección permanece y la vaca debe
ser aislada para evitar el contagio a otros animales.
En casos clínicos agudos los cuartos
generalmente están calientes e hinchados, la temperatura del animal asciende a
39,4ºC-41ºC. Algunas cepas de staphylococcus
aureos producen una toxina que produce constricción de los vasos sanguíneos
y coagulación, impidiendo el suministro de sangre al cuarto afectado. Entonces
se produce la mastitis hiperaguda con gangrena que provoca perdida del cuarto o
a veces la muerte de la vaca. La mastitis gangrenosa se caracteriza por una
coloración verde-azulada, tejido frio en la zona afectada y excreción de suero
sanguíneo a través de la piel.
Coliformes: entre las bacterias coliformes se incluyen Escherichia coli, Klebsielia y
Enterobacter. Estos microorganismos
viven en las heces, la cama, el suelo y el agua contaminada. El agente más
común de mastitis por coliformes es la Escherichia
coli que es de origen animal, esta bacteria produce una toxina que se
libera cuando mueren, causando un movimiento rápido de células somáticas hacia
la leche. Las inflamaciones por las endotoxinas generalmente van acompañadas
por fiebre y una reacción sistémica denominada toxemia, que a veces puede
llevar a la muerte. La leche se pone aguachenta y amarillenta, contiene flóculos
y grumos y la producción de toda la ubre disminuye drásticamente. Puede
presentarse destrucción del tejido secretor de leche, pero generalmente las
bacterias son eliminadas por acción de los anticuerpos y leucocitos y la vaca
se recupera en unos pocos días.
Las infecciones por coliformes son muy
comunes al comienzo y al final del periodo de seca y al parir, esta puede ser
consecuencia de: negligencia en el tratamiento de secado, mantenimiento de las
vacas secas en un ambiente húmedo y sucio, parición en un entorno contaminado y
demasiado tiempo transcurrido entre el parto y el primer ordeño.
Fuente: www.ugrj.org.mx.com
Mycoplasma
bovis: son un tipo especial de bacterias ya que no
poseen pared celular y dificultan el resultado del cultivo con los métodos
biológicos estándar. La mastitis causada por mycoplasmas se caracteriza por:
aparición repentina, formulación de una secreción purulenta en los cuartos
afectados, transmisión rápida a todo el rodeo, marcada reducción de la
producción y resistencia a los antibióticos.
A pesar de la severa reacción local de la
ubre, las vacas afectadas no suelen desarrollar síntomas sistémicos. El tratamiento
es inefectivo y surgen problemas serios en el rodeo si no se controla el nivel
de infección, teniendo que eliminar animales afectados.
Corynebacterium
bovis: las infecciones de la glándula mamaria con
estas bacterias son leves con un ligero ascenso del RCS. Los brotes de mastitis
causados por estas bacterias se han observado principalmente en rodeos en los
que no se realiza sellado posterior al ordeño ni la terapia de vacas secas.
Estreptococos
ambientales: estos microorganismos proliferan en
el entorno de la vaca. Las infecciones son muy comunes durante el periodo de
seca, y la tasa de infecciones nuevas también es alta poco antes del parto y al
principio de la lactancia, pero disminuye a medida que la lactancia avanza.
La prevalencia de la infección aumenta con
el ordeño húmedo, el uso de esponjas sucias y la estabulación inadecuada. En el rodeo, el porcentaje de cuartos
infectados es bajo y la mayoría de las infecciones dura menos de 30 días,
aproximadamente el 18% de estas infecciones se vuelven crónicas y persisten mas
de 100 días, alrededor del 40% de las infecciones causadas por estreptococos
ambientales durante la lactancia se curan espontáneamente.
Los casos clínicos generalmente son leves
con algunos grumos o flóculos, la leche se ve descolorida y el cuarto afectado
muestra una hinchazón moderada.
Microorganismos
oportunistas: este grupo de bacterias incluye más
de 20 especies de estafilococo, fuera del staphylococcus
aureus. Comúnmente se los denomina
staphylococcus sp o estafilococos cuagulasa negativos. Estas bacterias son
de especial interés porque son los microorganismos mas frecuentes en el rodeo.
Las infecciones suelen ser leves y los síntomas también, se limitan a grumos y
flóculos en la leche debidos a cambios
locales en la ubre.
Arcanobacteium
pyógenes, otros microorganismos: también causan mastitis microorganismos como: Pseudomonas sp, Nocardia
sp, Mycobacterium sp y varios bacilos, levaduras, mohos y algas. Las
infecciones con algunos de ellos se deben a procedimientos deficientes en la aplicación
de antibióticos.
Mecanismos de defensa contra la mastitis.
Defensa estructural del pezón: los tejidos que
rodean el canal del pezón forman la barrea principal contra las bacterias
causantes de mastitis. El esfínter mantiene firmemente cerrado al canal entre ordeños y evita la penetración
de bacterias. El canal permanece dilatado hasta 2 horas después del ordeño.
Alimentar a las vacas durante este periodo mantiene las vacas paradas, y le da
tiempo al esfínter para cerrarse.
La queratina es una sustancia gomosa
segregada por el epitelio que rodea en canal del pezón tiene la función de
bloquear parcialmente el orificio de pezón y de servir de barrera física.
Para conservar sanos los pezones es
necesario respetar las recomendaciones para la maquina de ordeño en cuanto a
funcionamiento y operación en los siguientes puntos: 1) nivel de vacio y
relación de pulsación,2) duración del ordeño y 3) retirado de las pezoneras.
Las bacterias que viven en el tapón de
queratina pueden necesitar ayuda mecánica para penetrar al cuarto, y la inserción
completa de la cánula empuja la queratina hacia arriba, ensanchando la abertura
y estirando el esfínter, lo que incrementa las posibilidades de penetración de
las bacterias.
Células somáticas: una vez que las bacterias atravesaron el canal del pezón, los
glóbulos blancos o leucocitos en la leche son un mecanismo de
defensa muy importante. Estas celulas constituyen el recuento de células
somáticas, los tipos de leucocitos son: neutrófilos, macrófagos y linfocitos.
En cuartos con mastitis el RCS puede
ascender a 1millon/ml. Esto se debe principalmente a que los neutrófilos migran
desde la sangre hacia la leche para fagocitar y matar a las bacterias.
Anticuerpos:
los anticuerpos son defensas químicas de la leche para combatir las bacterias
causantes de mastitis, que pueden aumentarse con vacunación. La función
principal de estos anticuerpos es identificar a las bacterias para que los
neutrófilos las reconozcan y fagociten, este proceso se conoce como opsonización
La vacunación ha sido utilizada para
aumentar la concentración de anticuerpos en sangre y leche contra bacterias
especificas de mastitis. La concentración de anticuerpos aumenta luego de la
inmunización y puede resultar efectiva por reducir la severidad de la mastitis
y por aumentar la capacidad de eliminar por si misma una infección, sin embargo
es inefectiva para prevenir infecciones nuevas.
Factores solubles no específicos: mientras que los anticuerpos son componentes solubles específicos en
la leche, hay otras proteínas no específicas que ofrecen resistencia a la enfermedad. El
sistema lactoperoxidasa-tiocianato-peróxido de hidrogeno en leche inhibe el
crecimiento de las bacterias como streptococcus
aureus, así como la mayoría de los estreptococos y colifórmes. La lizocima
destruye determinadas bacterias por destrucción de su pared celular. Se
denomina complemento e la leche a un a serie de proteínas que ayudan a preparar
a las bacterias para ser fagocitadas por los leucocitos.
La lactoferrina es una proteína que inhibe
el crecimiento de las bacterias por su propiedad de formar compuestos que ligan
el hierro, privando de esta manera a las bacterias que la necesitan.
Origen
e importancia de las células somáticas: son células
del cuerpo, el recuento de células somáticas (RCS) esta compuesto
principalmente por glóbulos blancos (99%) mientras que el restante (1%) son células
secretoras provenientes del tejido mamario, y se expresa en ml.
El RCS es la medida más usada para evaluar
el estado inflamatorio de la glándula mamaria y puede ser medido en la leche
proveniente de: cuartos individuales, vacas individuales, el lote completo.
La concentración de células somáticas puede
variar desde decenas de mil hasta decenas de millones por mililitro, según el
microorganismo que intervenga y el grado de inflamación. Una vaca que aporta un
bajo número de células será ignorada, mientras que una vaca que aporta un
número alto producirá leche anormal y deberá ser descartada.
Las vacas de mayor importancia son aquellas
que tienen mastitis subclínica, ya que están contribuyendo con una cantidad
sustancial de células somáticas a la leche del rodeo y , a su vez, son
ignoradas por mucho tiempo dado que su leche es normal a simple vista.
Detección de la presencia de mastitis.
La detección de la enfermedad puede realizarse por control del estado de
inflamación o bien por varios test en la sala de ordeño o en laboratorios que
detectan mastitis individuales o en todo el rodeo.
Las pruebas más sencillas y directas son
las que se realizan en la sala de ordeño:
-
Examen físico: deberá realizarse
con la ubre limpia e inmediatamente después que la vaca haya sido ordeñada. La
ubre se examina para detectar cuartos
individuales que estén duros, hinchados y calientes a causa de las mastitis.
También se observa si la glándula
mamaria presenta cuartos malformados o atrofiados con áreas de tejido
cicatrizal. Esto indicaría daño permanente a los tejidos debido a una
inflamación crónica.
-
Despunte: antes de comenzar el
ordeño se examinan los primeros chorros de leche, permite la detección de leche
clínicamente anormal, que presenta alteraciones en el color, grumos, flóculos y
aspecto aguachento.
-
California mastitis test: estima
el recuento de RCS y puede realizarse al pie de la vaca, para obtener resultados
más confiables el test debe realizarse
justo antes del ordeño, pero después de la estimulación y el despunte. el
reactivo es un detergen te que reacciona
con el material nuclear de las células somáticas formando un gel.
Las pruebas de laboratorio más usadas:
-
Cultivo de muestras de leche: se utiliza para identificar los tipos de
microorganismos que causan la infección en el rodeo , esto es importante ya que podemos recomendar
tratamientos y decidir la eliminación de vacas individuales
-
Conductibilidad eléctrica: este
método se vasa en la diferencia de
concentración de sales entre cuartos infectados de la misma vaca. Cuando un
cuarto presenta una infección bacteriana, aumentan los iones de sodio y cloruro
(sal) en la leche y disminuyen los iones de potasio y lactosa, mientras que el pH
aumenta. La corriente eléctrica fluirá mas fácilmente a través de la leche
mastítica por su mayor contenido en iones. Puede utilizarse un dispositivo
manual en la sale de ordeño.
-
Análisis de muestras del tanque:
puede realizarse determinando el RCS, el recuento total de bacterias y el tipo
de bacterias (recuento diferencial de bacterias) en la leche del tanque. el RCS
del tanque es controlado periódicamente por las plantas lecheras o
cooperativas, para asegurar la legalidad y calidad de la leche que reciben.
La
importancia de los tratamientos en el control de la mastitis.
El principio básico del control de la
mastitis es prevenir nuevas infecciones, sin embargo es inevitable nuevas
infecciones. Los distintos tratamientos pueden ser:
-Recuperación espontánea: el termino
recuperación espontanea se usa cuando
una vaca se cura por si sola de una infección, generalmente ocurre con
infecciones leves o recientes. Ni bien se establece la infección ocurren
cambios en el sistema inmunológico de la vaca para eliminar a los
microorganismos invasores.
-Eliminación de vacas refractarias:
la eliminación muchas veces es la única medida para dar fin a las infecciones
crónicas que no responden a repetidas terapias. Estas vacas con mastitis
crónicas pueden estar infectadas con
patógenos contagiosos, por lo tanto constituyen un reservorio de microorganismos
causando la posibilidad de contagiar a vacas sanas.
-Tratamiento durante la lactancia:
la gran preocupación de los productores es muchas veces como usar bien los
antibióticos durante la lactancia. Estos casos deben ser atendidos en forma
rápida y apropiada. El tratamiento durante la lactancia es indicado cuando las
vacas están infectadas con Streptococcus agalactiae, el RCS es mayor 400000/ml
y cuando la mastitis es clínica.
-Terapia de mastitis aguda toxica:
esta mastitis es causada generalmente por Escherichia coli y Klebsiela
pnumoniae, estas bacterias producen endotoxinas que provocan depresión,
deshidratación progresiva, incapacidad de permanecer en pie, diarrea y otros síntomas.
Esta condición se conoce como toxemia. Para ser exitosa la terapia debe dirigirse
a las endotoxinas sanguíneas que causan los síntomas. Los programas de
regímenes terapéuticos incluyen vaciado
de los cuartos afectados, administración de antibióticos (tetraciclina,
ampicilina, eritromicina y sulfonamida), grandes volúmenes de fluidos
electrolíticos, agentes antiinflamatorios, glucosa y bicarbonato y calcio.
-Terapias de mastitis clínica subaguda:
el tratamiento es acompañado por el ordeñe manual frecuente para remover las secreciones,
bacterias y residuos celulares. La mayoría de los veterinarios recomienda
continuar con el tratamiento al menos por 24 hs después de la desaparición de
los síntomas clínicos. La tasa de curación depende de cuanto tiempo estuvo
presente la infección, la edad de la vaca y el tipo de organismos y factores.
-Terapia de mastitis subclínica: el
tratamiento es igual que en los casos clínicos, si la mastitis se produce
durante la lactancia el tratamiento se indica solamente ante la presencia de Streptococcus agalactiae, o
bien si el productor corre el riesgo de perder el mercado por el alto RCS del
tanque.
-Terapia al secado: el tratamiento
de todos los cuartos de todas las vacas
es uno de los puntos mas importantes de un plan integral de control de mastitis
porque la terapia de las vacas secas cura las infecciones existentes y a su vez
previene el desarrollo de infecciones nuevas. Otras ventajas son: la tasa de
curación es mas alta que durante la lactancia, pueden emplearse concentraciones
mayores de antibióticos de acción prolongada, se reduce la incidencia de
infecciones nuevas durante el periodo de seca, el tejido dañado puede
recuperarse antes de la parición, se reduce la mastitis clínica al parto, no se
contamina con drogas la leche que podría ser vendida, se tratan todos los
cuartos infectados, no se necesitan análisis de laboratorio.
Procedimientos para los tratamientos: en la mayoría de los casos el tratamiento es aplicado inmediatamente
después de que se retiran las pezoneras de ordeño. Si bien las ubres y los
pezones parecen limpios por la higiene preordeño y la acción de la maquina de
ordeño, las puntas de los pezones deben ser desinfectadas con alcohol 70% antes
de la inserción de la cánula porque podríamos arrastrar bacterias presentes en
el esfínter hacia el interior del canal. En casos que el rodeo este contaminado
con microorganismos contagiosos, como Strptococcus agalactiae, se recomienda el
uso de guantes. Es muy importante que todos los animales tratados se
identifiquen claramente, además deben separarse de los demás animales para
evitar que su leche sea mezclada con la de los animales no tratados.
Causas de falla en los tratamientos: las fallas pueden deberse a: demora en el tratamiento, elección
indebida de los medicamentos o la dosis, interrupción prematura del
tratamiento, resistencia de los microorganismos a las drogas, desarrollo de
bacterias de “forma L”, protección de las bacterias dentro de los glóbulos
blancos y presencia de infecciones en sitios profundos, cubiertos por tejido
cicatrizal, grumos e hinchazón, que no permiten la libre distribución de la
droga en el cuarto afectado.
Conclusión:
Como sabemos, la mastitis, es el resultado
de la interacción de muchos factores y es por esto que se transforma en una
enfermedad compleja, para la cual no existe una única herramienta de prevención
y es por esto que, necesariamente, se deben implementar programas de control
exhaustivos. Es en este punto donde juega un papel preponderante el medico
veterinario para la orientación del productor y la capacitación del ordeñador,
ya que en la mayoría de los casos se presenta ésta enfermedad debido al mal
manejo del rodeo y del ordeñe. Debemos mencionar aquí, que económicamente, hoy
en día resulta mas barato prevenir una mastitis que tratarla.
Bibliografía:



No hay comentarios:
Publicar un comentario