Catedra: CLINICA DE ANIMALES DE
INTERES ZOOTECNICO
Profesor: Dr. Jorge Merlassino
Alumno: Andrea Medero
RESUMEN:
En el siguiente trabajo se estudiaran
los principales componentes del sistema de producción de cerdos a campo. Ya que
en Argentina sigue un ritmo de
crecimiento. Este tipo de crianza de cerdos que se caracteriza por el
desarrollo de todas sus etapas a campo, por su baja inversión inicial, respeto
por el medio ambiente, por conservar el recurso suelo y respetar el confort
animal, es adoptado por una gran cantidad de productores.
Se describirán las instalaciones: este sistema
requiere instalaciones para todas las etapas biológicas del cerdo. Las
instalaciones deben ser funcionales y en lo posible utilizar materiales
disponibles en la zona, con el fin de reducir los costos de inversión. Alimentación:
en
la cría a campo se emplean idénticos principios que en confinamiento, raciones
completas que aportan todos los nutrientes en cantidad y calidad a lo largo de
las distintas etapas fisiológicas y tamaño de los individuos. Genética: para este tipo de producción a
campo se recomiendo utilizar razas rusticas, con buenos caracteres de
productividad, como velocidad de crecimiento y contenido de magro. Manejo: el
productor deberá ordenar y llevar a la práctica un conjunto de
técnicas que demanda cada paso del proceso productivo.
INTRODUCCION:
Los
sistemas de producción a campo es todo proceso productivo de cerdos
desarrollado al aire libre sobre una extensión de campo, en donde se utilizan o
no las pasturas como recurso alimentario. La cría de cerdos a campo, cubre las
etapas de servicio, gestación, parto-lactancia y recría. Esta producción
evoluciono notablemente en los últimos años, con la incorporación de conceptos
y equipos novedosos, simples y económicos que permiten alcanzar una
productividad e intensificación comparables a la obtenida en los buenos
planteos en confinamiento.
No
se trata de proponer un antagonismo entre ambas modalidades, ya que cada una
tiene sus ventajas y desventajas, sino de ofrecer una alternativa mejorada que
permite obtener altos rendimientos con menor inversión en instalaciones a
cambio de una mayor participación del trabajo, atributos que resultan
particularmente adecuados a las condiciones agroecológicas y socio-económicas
de Argentina.
Las
grandes ventajas de cría de cerdos a campo son:
·
Menores costos de instalaciones.
·
Aire puro sin olores ni gases. (Bajo impacto ambiental)
·
No hay trabajo de limpieza ni de eliminación de deyecciones,
porque se incorporan directamente a la tierra favoreciendo la fertilidad de la
misma.
·
Trabajo más agradable. Genera condiciones que estimulan las
capacidades humanas al aumentar la complejidad del trabajo rural.
·
Bienestar de los animales; mansedumbre. (El bienestar animal
se está imponiendo en todo el mundo mediante estrictas leyes.)
·
Reducida incidencia del Síndrome mastitis-metritis-agalaxia
(MMA) y cistitis en las cerdas.
·
Escasa o nula incidencia de diarrea en lechones lactantes.
·
Menos roedores.
·
Mejor condición y peso de los lechones al destete.
·
Sin gastos de energía para la calefacción.
·
Menos gastos en medicamentos (hierro inyectable, antibióticos
y desinfectantes)
·
Necesita imperiosamente sombra de arboles, por lo tanto
estimula la plantación y cuidado de los ejemplares.
·
Entrega un producto de mayor calidad, saludable y sabroso.
….” LA CRIA A CAMPO NO SIGNIFICA
VOLVER AL PASADO. PUEDE CONSIDERARSE UNA ALTERNATIVA TECNOLOGICA DE
DIVERSIFICACION VALIDA, QUE AUN PUEDE AVANZAR MAS…..”
TEMAS
A DESARROLLAR:
v INSTALACIONES
v ALIMENTACION
v GENETICA
v MANEJO
INSTALACIONES:
Los
criterios para elegir la zona donde instalar un criadero a campo son
básicamente dos: sitios no inundables y con pendientes moderadas. Son
preferibles parcelas abrigadas, con suelos de buena permeabilidad, siendo
óptimos los arenosos.
La
densidad por hectárea dependerá de las propiedades de suelo y del régimen de
lluvias, para evitar la destrucción del tapiz vegetal, que el suelo quede
desnudo, compacto, con cascotes o pozos, causa de lesiones pódales y en los
miembros, así como la formación de grandes charcos. También a dificultar el
movimiento del criador y su vehículo si en tiempo lluvioso se forma barro.
Hay
que prever la disposición de calles suficientemente anchas entre las parcelas o
piquetes para la circulación de vehículo-tractor, camioneta o cuatriciclo
utilizado en las tareas complementarias: distribución de alimento, recolección
de lechones al destete, traslado de las parideras, etcétera.
En
un sistema de cría de cerdos las categorías de animales presentes, a las cuales
tenemos que ofrecerles alojamiento son las siguientes:





CERDAS GESTANTES:
Los piquetes se limitan con alambrado
eléctrico cuyo uso universal es en verdad la clave del desarrollo de este
sistema de producción de cerdos, por su efectividad, bajo costo y movilidad. En
las esquinas se colocan postes de baja altura que pueden ser permanentes y
varillas para suspender hilos. Para piquetes de cerdas en gestación solo es
necesario dos hilos uno a 10 cm y otro a 45-50 cm del suelo.
Para
las cerdas en gestación se pueden usar los refugios móviles, ya que si se
instalan fijos, suelen formarse grandes hoyos en el terreno, que luego es
trabajoso rellenar. Se consideran distintos modelos de refugio, desde arcos
grandes de 3 metros por 5 metros considerando 1,5 metros cuadrados de área de
reposo por cerda, hasta techos con fondo (protección) al sur, mejor si son
desarmables en partes para facilitar su traslado. En ellos se alojaran lotes no
muy numerosos, algo así como 10 cerdas en cada uno.
Las
cerdas están alojadas en forma grupal durante toda la gestación provista de
bebedero, una pastura natural y cereal
(maíz, pellet soja, pellet de trigo) en comederos de gran capacidad. El ingreso
y salida de los animales o cerdas se efectúa por tranqueras electrificadas.
Otra
alternativa para refugiar las hembras gestantes es disponer de una buena
cortina de arboles para protegerlas del viento, frio o calor.
Las
cerdas gestantes son llevadas a los piquetes de parto-lactancia unos 10 días
antes de la fecha prevista para el parto.
CERDAS EN
PARTO-LACTANCIA:
Una
parcela o piquete para alojar cerdas en parto-lactancia tendrá entre 5 a 10
parideras en una superficie de ½ a 1 hectárea.
Si
las parideras se disponen juntas dentro de un mismo piquete, sin divisiones, es
esencial que las fechas de parto no difieran en mas de unos pocos días para
evitar lactancias cruzadas, es decir que los hijos de una cerda mamen de otras
madres y desplacen a los más pequeños, cosa que puede ocurrir después de los 10
días de edad, pues hasta entonces permanecerán junto a su madre con poco
desplazamiento.
La
experiencia local se inclina por instalaciones en piquetes individuales para
reducir el amamantamiento cruzado y la reunión de cerdas lactantes, habito
común luego de 10 días post-parto.
Es
indispensable que el terreno no se anegue aun con lluvias copiosas. En verano
convendrá mucho contar con sombra de arboles altos.
Como
durante la lactancia una cerda bebe hasta 30 litros diarios, son ideales los
bebederos tipo pileta, con nivel regulado por flotante cubiertos para evitar
desperdicio y embarre.
PARIDERAS: Consiste en un marco,
armazón o cabestro de madera o caño recubierto por un techo de chapa arqueada y
la parte posterior, contra frente y la mitad del frente de madera, como durante
los primeros días posteriores al parto los lechones deben permanecer en la
paridera a cada una de ellas se le adicionara una protección desmontable, una
simple tabla de 20 o 25 cm de altura que atraviesa la entrada que permita salir
a la cerda pero no a los lechones. Las medidas de la paridera son 1,5 m de
largo, 1,2 m de alto y 3 m de ancho, la puerta la entrada de ser de 75 cm. Las
dimensiones deberán ser respetadas debido a que han sido establecidas con la
finalidad de que las madres entren y se acuesten diagonalmente para evitar que
aplasten o molesten a los lechones.
Las
filas de parideras estarán separadas de 20 a 22 metros entre ellas y dentro de
la misma fila se guardaran de 10 a 12 metros de separación entre cada una, de
este modo las cerdas dispondrán de un territorio propio.
Las
parideras se ubican con el fondo hacia los vientos dominantes, generalmente con
la puerta hacia el norte, cuidando sellar los bordes donde asientan para
impedir las filtraciones de aire.
Un
ingrediente básico que, puede decirse, condiciona el éxito de la cría a campo,
es la paja de la mejor calidad (de trigo, por ejemplo) vital para que la cerda
construya su nido, mullido y térmico, que es clave para reducir la mortalidad
de lechones por aplastamiento o enfriamiento.
Unos
días antes del parto se coloca un fardo a la entrada de la paridera y se deja
que la cerda por si sola construya su nido, un comportamiento muy
característico de la especie que ocurre 8-24 horas antes del inicio del parto.
A lo largo de la lactancia es necesario ir añadiendo pequeñas cantidades de
paja, lo que insume alrededor de 1 fardo por semana; esto es 3-4 fardos convencionales
en todo el periodo. Este ingrediente representa un costo extra del sistema.
CERDAS PARA SERVICIO:
Luego
del destete, la mayoría de las cerdas entraran en celo entre el 4to y 10mo día
posterior.
Los
piquetes que reciben a las cerdas prontas a tomar servicio deben ser contiguos
a los que alojan a los padrillos, pues el estimulo de estos (olor, visión,
audición) ayuda a exteriorizar los signos de celo cuya manifestación inequívoca
es el reflejo de inmovilidad a la presión en el dorso-lomo.
La detección
de celo es una de las actividades más delicadas de la cría, pues cuando las
cerdas y padrillos se alojan por separado, la deficiente detección de celo
constituye una causa principal de caída de la fertilidad, que es a su vez un
componente fundamental de la productividad. Por esto el diseño de las
instalaciones no debería escatimar detalles en pos de facilitar esta operación
y a conducir la cerda en celo hasta el padrillo.
Las
medidas de los piquetes de las cerdas
dependen del tipo de suelo, pero en general como orientación se cita una carga
de 20 cerdas por hectárea.
El
ingreso y salida de los animales o cerdas se efectúa por tranqueras
electrificadas.
La
protección de calor en verano es de vital importancia, ya que alrededor de los
40 grados centígrados de temperatura ambiental existe riesgo de mortalidad por
“golpe de calor”. La solución ideal consiste en una cortina forestal que
proyecte sombra a partir del mediodía; los arboles tendrían que estar fuera del
alcance de los animales. En caso contrario, será preciso formar charcos en los
días de extremo calor, sin prejuicios.
PADRILOS:
Los
piquetes de los padrillos, o “padrilleras” contaran con alambrado fijos, (los
únicos fijos de todo el criadero) de la mejor calidad con puertas de fácil acción,
una línea interna de alambrado eléctrico ayuda a presérvalos.
Se
recomienda utilizar piquetes cuya superficie permita la ejercitación, cortejar
y montar a la hembra, para esto es adecuado destinar 700 metros cuadrado por
piquete. Se recomienda el uso de alambrado fijo tipo chanchero reforzado con
hilos de alambre de púas. Estos piquetes deben contar con superficie de sombra
adecuada a las necesidades del padrillo 4 a 4,5 metros cuadrados por animal, y
se deben colocar para las épocas de calor refrescaderos (piletas de media caña
para bovinos, enterradas en el suelo) que permanecerán en las épocas de calor
llenas de agua para que el padrillo pueda sumergirse en ellas y mantener sus
testículos con la temperatura adecuada. Se le deben colocar comederos individuales
y bebederos para cada padrillo.
Las
puertas deben ser de caño o madera y deben permitir el intercambio visual,
auditivo y olfativo con las hembras y que le padrillo joven vea trabajar a los
otros padrillos para facilitar su aprendizaje.
Los
pisos no deben ser excesivamente lisos ni rugosos ni tener mucha pendiente para
evitar resbaladas o lesiones en las patas.
LECHONES DESTETADOS:
El
destete se efectúa al cabo de 21-28 días de lactancia, aunque hoy se dispone de
la tecnología para hacerlo a partir de los 14 días sin dificultada ni
sofisticaciones (destete precoz segregado). Originalmente la cría a campo
concluía con la venta de los lechones al destete o bien su recría en
instalaciones convencionales. Sin embargo a partir de los años 90 se desarrollaron
equipos siguiendo la misma filosofía de aquella: móviles, portátiles, colocadas
a la intemperie, de bajo costo, que no requieren calefacción ni extracción
mecánica de aire. Condiciones que ponen la práctica del destete precoz al
alcance de todos. Hoy el destete a 3-4 semanas se lo llama convencional y
precoz a menos de 21 días.
Se
puede utilizar los “cajones de recría”, son microambientes o cuchas, un pequeño
recinto como área de reposo o dormitorio de adecuada aislación térmica, libre
de corriente de aire, seco, en el que los lechones se esconden y encuentran una
zona de refugio confortable que es calentado con el calor corporal que ellos
mismos generan y que se conserva resultando suficiente para satisfacer sus
necesidades sin calefacción, aun en las épocas mas frías, también es un refugio
que los protege del sol, calor en el verano , de los vientos y lluvias.
La
elección de los materiales es muy importante; además de las propiedades
térmicas, deben resistir a la intemperie, a la luz solar y a la actividad
lúdica de los lechones, ser limpiables, transportables y durables. La madera
funciona aunque es menos durable, también chapas revestidas con poliuretano.
Los cajones de
recría admiten dimensiones variables. El diseño más difundido y probado aloja
15-18 lechones en todo el período o etapa.
El patio es de
piso ranurado de plástico, material insuperable ya que otros como varillas de hierro
o madera no son adecuados. Sus límites son de alambre, mallas de hierro, o
cualquier otra material práctico, con una altura mínima de 90 cm ya que los
lechones son muy saltarines. El comedero se coloca dentro de la cucha, los hay
de plástico duro con bocas circulares de 10 cm de diámetro para evitar la
revuelta de la ración por parte de los lechones o que se tiren encima. Los dos
bebederos chupetes se colocan en la reja externa separados entre sí al menos 40
cm y a una altura de 15 cm del piso. La tapa superior o techo del „cajón‰ debe
ser rebatible para permitir el ingreso de un operario al recinto y también para
regular la ventilación.
Normalmente la alimentación es a voluntad
“ad libitum” desde el mismo destete.
Otra alternativa
más económica de instalación para recría consiste en refugios o “cuchas”, análogas
a los anteriores, pero que se colocan directamente sobre la tierra, con un
patio externo más amplio, también de tierra.
Ubicación: se
pueden ubicar en el medio del campo sin ningún reparo adicional, todo el año, con
el fondo al sur. Las deyecciones caen directamente en el suelo y tras una tanda
se los corre aun terreno limpio.
También se los
puede colocar fijos, al aire libre o bajo un tinglado o cobertizo, en cuyo caso
es preciso construir un piso de concreto que recolecte las deyecciones hacia
una canaleta que las recoja y elimine.
El área donde se
ubiquen estas instalaciones estará suficientemente alejada de donde se encuentren
otras categorías de cerdos reproductores o en crecimiento-terminación, con el
propósito de reducir el riesgo de transmisión de agentes infecciosos que,
aunque no desemboquen en enfermedad clínica, constituyen un desafío
inmunológico que reduce el crecimiento. Por supuesto, en caso de enfermedad
clínica se agregan pérdidas mayores. La distancia de las restantes categorías
no está definida con exactitud pero se calcula que algunos cientos de metros son
suficientes.
AGUA:
La instalación de
las líneas de agua se plantea con caños plásticos enterrados a escasa
Profundidad, eventualmente
sobre la superficie, fuera del alcance de los cerdos, en las calles para
impedir su destrucción por el hozado.
Respecto a los
bebederos, los de uso más frecuente son del tipo “chupete”, fijados sobre postes
a 50 cm de altura en la línea del alambrado, cuidando que el goteo caiga sobre
una pequeña loza con pendiente hacia el exterior o sobre una pequeña porción de
piso ranurado (de los empleados para lechones) encima de una reducida cámara
cavada en la tierra. (Cuidado que en verano se calientan los picos).
Sin embargo este
modelo de bebedero no siempre entrega el volumen suficiente de agua a veces son
preferibles los bebederos pileta de cemento, ubicados en la esquina donde
convergen cuatro piquetes, regulados con flotantes, cubiertos con una tapa que
deje otras tantas bocas que permiten la introducción de la trompa de las cerdos.
MANGA:
Siempre será
ventajoso contar con una manga, aunque sea pequeña para efectuar las
Operaciones con
el plantel como vacunaciones, anillado de trompa, etcétera. El cepo tiene
escasa aplicación y por el peligro de traumatismos que genera, no es recomendable.
ALIMENTACION:
En la cría a
campo se emplean idénticos principios que en confinamiento: raciones completas
que aportan todos los nutrientes en cantidad y calidad a lo largo de las
distintas etapas fisiológicas y tamaño de los individuos. Por ello se sugiere
no dejar librado el aporte de nutrientes al eventual consumo de pasto, aún
cuando haya suficiente disponibilidad. Las raciones se pueden suministrar en
bateas de cemento o madera dura o directamente en el suelo. En el segundo caso
se asumirá existirá una pérdida o desperdicio del 10 %.
Es importante
procurar reducir al mínimo las agresiones durante las comidas, alojando
cerdas de
similares tamaños , cachorras aparte y otorgar suficiente espacio lineal, de
comedero o piso, por cabeza puesto que todas comen simultáneamente. También
atender a que las cerdas con orejas péndulas, de menor campo visual, suelen ser
sometidas por las de orejas erectas. Estos son motivos adicionales para no
formar grupos muy numerosos.
ALIMENTACION PARA CERDAS EN GESTACION:
Las raciones de
gestación son simples, para cubrir los siguientes requerimientos por
kg de ración:
2,8-3,2 Mcal de energía digestible; 12% de proteína, 0,6% de lisina; 4-7 % de
fibra; 1% de calcio y 0,55% de fósforo.
En esta etapa y
contra lo que a menudo se cree, el grano debe ser de óptima calidad,
poniendo especial
énfasis en que esté libre de micotoxinas, en particular de “Zearalenona”, puesto
que este contaminante, que puede hallarse en maíces de buen aspecto, es el
causante de enormes pérdidas de fertilidad.
La cantidad diaria
a suministrar varía entre 2 y 2,6 kg por cerda según tamaño y estado
Corporal.
Ingrediente %
|
Maíz 69,35
|
Expeller de soja 6,40
|
Afrechillo de trigo 20,00
|
Ceniza de hueso
2,70
|
Conchilla 0,50
|
Sal 0,35
|
Núcleo vitamínico
Mineral 0,50
|
Lisina 0,20
|
|
ALIMENTACION EN PARTO LACTANCIA:
Se adopta un
régimen alimenticio idéntico al de maternidades con raciones completas. Los
requerimientos diarios son de 18-22 Mcal de Energía Digestible, (equivalentes a
6-7 kg de ración), 950 g de proteína y 55 g de lisina. Los requerimientos por
kg de ración son: 3-3,2 de Energía Digestible; 16% de proteína; 0,9% de lisina;
0,8% de calcio y 0,55 de fósforo.
En cuanto
cantidad a suministrar según la etapa de la lactancia la idea es regular el
consumo de modo
que se alcance un máximo, tan alto como sea posible, en la tercera semana de
lactancia, momento en que la producción de leche es mayor 10 a 15 litros por
día, tanto como una vaca, lo que implica una enorme movilización de reservas
corporales. Para posibilitar que el apetito de las cerdas permita ese gran
consumo, no deben haber consumido demasiado alimento durante la gestación ni al
comienzo de la lactancia.
Ingrediente %
|
Maíz 68,40
|
Exepeller de
22,00
soja
|
Afrechillo 5,00
|
Ceniza de hueso
3,00
|
Conchilla 0,55
|
Sal 0,35
|
Núcleo vitamínico
Mineral 0,50
|
Lisina 0,20
|
ALIMENTACION PARA RECRIA:
Se entiende por “recría”
el período que va desde el destete hasta la 8º ó 10º semana de edad. Tiene un
especial significado fisiológico y productivo ya que se trata de la transición
de lactante a consumidor plenamente adaptado de dietas vegetales con ingredientes
groseros como maíz y soja.
La idea actual
consiste en dividir la etapa de recría en “fases” asignando a cada una de ellas
una ración que se va simplificando a medida que los lechones crecen. Se parte
de la fase 1 que es la que exige raciones de mayor complejidad pero que solo
dura 7 días. La fase 2 dura 13 días y la
fase 3 16 días.
Ingrediente Fase I Fase II Fase III
|
||
Maíz
41,00 44,80 67,85
|
||
Expeller de soja,
44% PC
15,50 23,70 28,50
|
||
Suero lácteo
25,00 10,00 -
|
||
Plasma
sanguíneo 6,50 - -
|
||
Concentrado
de soja …
2,00 6,00 -
|
||
L-Lisina
0,10 0,20 0,15
|
||
DL-Metionina
0,15 0,05 0,25
|
||
Lactosa
5,00 10,00 -
|
||
Aceite de soja
2,00 2,00 -
|
||
Fosfato dicálcico
1,05 1,60 1,90
|
||
Carbonato de calcio
1,00 0,95 0,65
|
||
Sal
0,30 0,30 0,30
|
||
Núcleo vitamínico-
mineral y antibiótico
0,40 0,40 0,40
|
||
Los altos precios de la ración balanceada
exigen una utilización conservada de la misma. No siempre la mejor ración esta
al alcance del productor. Entonces es necesario tanto para el productor como
para el animal, contar con un sistema de alimentación que permita dar
continuidad a la producción. La pastura es un recurso alimenticio del cual se
puede disponer de manera permanente. Por supuesto que el forraje como tal no es
el mejor alimento para monogastricos pero tiene la enorme ventaja de actuar
como amortiguador cuando se producen las crisis de precios en el mercado. Para
lograr una buena conservación de la pastura y ofrecer abundante alimento de
forma permanente durante todo el año, se puede realizar rotación de los
animales entre los piquetes dejando cierto tiempo vacios los mismos de manera
de recuperar la vegetación. Esta rotación depende tanto de la carga animal como
de las condiciones climáticas existentes.
GENETICA:
La elección de los
tipos genéticos a usar tiene que estar en concordancia con la definición del
ambiente que vamos construyendo. Es así que elegimos razas capaces de tener un
buen comportamiento en la cría a campo previamente definida. Ponzoni (1997)
sostiene la importancia de las razas criollas cuando el sistema de producción
incluye el pastoreo y el manejo al aire libre como componentes importantes del
ambiente. Para ello optamos en primer lugar, de tener una raza con fines
maternales, con buena adaptación al pastoreo y rústica.
Para la elección del material
genético se recomienda utilizar reproductores procedentes de un programa de
mejoramiento con base solida en selección para caracteres de productividad,
como velocidad de crecimiento y contenido de magro, a los que últimamente se agregan caracteres de calidad de la carne,
un rasgo de creciente importancia.
Las madres deben ser
hibridas, resultantes de cruzamientos planificados entre líneas seleccionadas
por crecimiento y magro, para aprovechar el máximo de vigor hibrido o
heterosis, fenómeno que exalta el rendimiento reproductivo de las cerdas, amén
del potencial para crecimiento y magro.
Los padrillos tendrán un alto
valor genético para velocidad de crecimiento y contenido de magro, pero carecen
de efecto sobre la productividad de las madres como fertilidad y tamaño de
camada, atributos exclusivos de los vientres. Padrillos de la raza Duroc
otorgan a la carne características organolépticas francamente superiores,
transmiten un mayor contenido de grasa intramuscular, que es uno de los rasgos
que la favorecen.
Cachorras Landrace x
(Yorkshire x Duroc), denominadas H3-21 pueden aparearse indistintamente con
padrillos Duroc o Yorkshire dando la progenie para faena.
Otras razas mas rusticas que
se pueden utilizar en criaderos a campo son:
SPOTTED POLAND: raza de origen americano; el color de su cuerpo
es 50% blanco y otro tanto de manchas negras. Puede predominar alguno de ambos
colores hasta un 80% admitido como máximo. Se caracteriza por poseer buena
estructura ósea, aunque cierta debilidad en sus aplomos. Buena rusticidad y
aptitud lechera. Se cría
en forma extensiva o semi extensiva.
PIETRAIN: Raza porcina seleccionada, sobre todo por la
calidad de su canal, junto con Hampshire y Landrace.
Se utiliza para mejorar la calidad de la carne en cruces simples o a tres vías.
Y, casi siempre, como es lógico, se utilizan los machos, y rara vez las
hembras.
MANEJO:
SERVICIOS Y GESTACION:
En cuanto a las pautas de manejo de la
cachorra de reposición se deben tener en cuenta aspectos referidos
fundamentalmente a su edad y peso al primer servicio este deberá ser de 130 kg y
de alrededor de 8 meses de edad, esto permitirá que el animal desarrolle un
nivel adecuado de grasa dorsal como reserva energética para la producción de
leche y coincide con el tercer ciclo estral posterior a la pubertad,
considerado como el adecuado para comenzar con su vida reproductiva.
Habrá piquetes para servicios y piquetes
para gestación. En los primeros las cerdas que fueron servidas permanecen, al
menos, 4 semanas, cuando se chequea el no retorno a celo, en cuyo caso se las da por preñadas. Dicho
chequeo comienza a partir del día 18 post-servicio y se extiende hasta el día 23. Esta tarea es de
suma importancia pues constituye la prueba de o
diagnóstico de preñez; aunque se dispone desde hace muchos años de instrumentos
más o menos sofisticados para el
diagnóstico de preñez, la práctica no les ha reconocido gran utilidad y son
poco aplicados. Las cerdas que no retornan a celo se las da por gestantes y se
pasan a otro piquete donde proseguirán
su gestación. En éstos volverá a controlarse la posible repetición de celo unos
20 días más tarde y en forma general ante posibles repeticiones a ciclos irregulares.
Puede recomendarse agregar un padrillo de “repaso” en estos lotes para cubrir
cualquier cerda repitente que pase desapercibida al ojo humano. El manejo de
las cerdas a campo se facilita si se disponen de perros de la raza Border Collie,
capaces de realizar un trabajo impecable también con cerdos.
PARTO Y LACTANCIA:
Si se aloja un grupo de cerdas en un
único piquete conteniendo las parideras, por lo general cada una escoge una
paridera; rara vez la ocupan dos y es excepcional que el parto se desarrolle
fuera de su refugio, salvo que la cerda encuentre alternativas más
confortables, como ser sombra en verano. El procedimiento recomendado es dejar
en completa tranquilidad a las cerdas antes, durante y por lo menos 24 horas
posteriores al parto, lapso en que las madres suelen permanecer casi inmóviles
administrando a su camada el vital calostro. Sólo se las vigila y se actúa en
las raras ocasiones en que se presenta alguna dificultad. Las cerdas quedan
solas y el parto no se asiste en absoluto procurando mantener un clima de completa
tranquilidad. Una vez concluido al día siguiente, se cuentan los lechones
nacidos vivos, se eliminan aquellos nacidos muertos y los restos de placenta
mediante acciones silenciosas sin disturbar a la cerda. Los cordones umbilicales
no se tocan, dejando que se sequen por si solos. La idea es intervenir lo menos
posible en los primeros 3 días post-parto. Poco ejercitada, pero decisiva para aumentar
el número de lechones destetados, resulta la práctica de transferir lechones
con el propósito de igualar el tamaño de las camadas. Se efectúa sin dificultad
dentro de los primeros 3 días de vida, por esto es oportuno que las cerdas de
un grupo paran en un corto lapso. El número de lechones al nacer es un carácter
con un promedio de 10/11 pero muy variable: es igualmente probable una camada
de 6 (o menos) y de 14 (o más). Así, este procedimiento compensa esas diferencias
naturales e incrementa las posibilidades de sobrevivencia de lechones en camadas grandes
con las tetas ociosas de las pequeñas. La ingestión de calostro que ocurre en
las horas que siguen al nacimiento es directamente una cuestión de vida o
muerte. Un lechón que no ingiere una mínima cantidad carece de toda chance de
sobrevivir, pues los anticuerpos calostrales lo protegen contra una diversidad
de infecciones, incluso algunas que podrían provenir aún de su propia madre. En
estas pequeñas operaciones residen las claves que distinguen a los buenos
criadores, con su capacidad de percibir lo que les sucede a los animales. Por
esto el “factor humano” es un atributo esencial, distintivo de la cría a campo y
es capaz de reemplazar con creces las inversiones en instalaciones.
No
es necesaria la inyección de hierro como en confinamiento pues se ha demostrado
que el contacto con el suelo impide el desarrollo de la anemia ferropenica. Más
aun, se comprobó que dicha inyección, indispensable en confinamiento, es una de
las causas que provocan mortalidad y menor peso al destete, por lo tanto
evitarla constituye una gran ventaja para los lechones.
El corte de colmillos se puede evitar en
los criaderos en que no aparezcan problemas de injurias en los lechones
(mejillas o carrillos) o las glándulas mamarias. Sin embargo en los últimos tiempos
se observa una creciente incidencia de la patología conocida como epidermitis exudativa
o enfermedad del lechón grasoso, una infección antes rara, que ingresa por las heridas
en la piel causada por los colmillos, en cuyo caso habrá que proceder al corte
en el segundo día de vida. Se desaconseja el corte de cola. Señalada y
castración. La señalada se realiza mediante el llamado código o sistema
australiano de muescas en las orejas, puede ser individual (no se justifica en criaderos
comerciales) o de la camada con el número de semana de nacimiento. Con el
correr de los días la cerda va perdiendo su ansiedad y nerviosismo por defender
a su camada y entonces estas operaciones resultan más sencillas entonces, a
menudo basta con realizarlas cuando la madre está comiendo.
El
tiempo frío no constituye obstáculo alguno para la supervivencia de los
lechones, sí en cambio el calor. Cuando la temperatura ambiente se aproxima a
los 40 ºC existe riesgo de que las cerdas mueran por “golpe de calor”, en cuyo
caso no habrá más remedio que formar charcos. En la región pampeana esta
emergencia suele presentarse unos pocos días al año.
Luego
del destete la paridera se desplazará dentro del piquete hacia un lugar limpio
y se eliminarán los restos de cama o se los quemará. Al cabo de una dos
temporadas o años se recomienda mover toda el área de parto-lactancia hacia un
terreno nuevo, que antes no haya alojado cerdos. Lamentablemente, esta práctica
se aplica poco, menos de lo conveniente.
RECRIA:
Concluida la etapa de recría los cajones se
limpian a fondo y desinfectan antes de ser ocupados por una nueva tanda. Los
lotes se forman reagrupando lechones de edades y pesos similares. Los cajones
contiguos alojarán animales que no difieran en más de 1-2 semanas de edad (todo
adentro-todo afuera). Como norma general luego del destete se suministra la ración
a voluntad. Sin embargo en algunos criaderos suelen presentarse las temidas
diarreas post-destete (atención a las deficiencias de ambiente), en cuyo caso
convendrá adoptar un esquema de restricción alimenticia durante los 10-12 días
posteriores al destete, partiendo de 100-150 g/cabeza/día divididos en dos
tomas que se va aumentando paulatinamente.
EL
ANILLADO:
Es necesario para
la conservación de las pasturas realizar el anillado de los cerdos del rodeo
reproductor. Para ello le colocamos un alambre en el hocico de manera de evitar
la costumbre de hozar y dañar el tapiz vegetal.
CONCLUSION:
Solo se han mencionado algunos de los
aspectos que hacen el manejo del cerdo, sin duda quedan muchos temas por
analizar, pero como conclusión quisiera recordar que las técnicas de manejo son
practicas criteriosas, que aplicadas con habilidad y adecuadas a cada
establecimiento, se tornan en una herramienta fundamental para hacer que el
sistema de producción de cerdos a campo sea eficiente y es esto un pilar
fundamental para que la producción de nuestro país se torne competitiva,
sustentables y ocupe el lugar que todos deseamos.
BIBLIOGRAFIA:
inta.gob.ar
Fotografías: fuente propia establecimiento “San Alejo” criadero de cerdos a
campo, zona rural General Pico. Productor: Javier Alejandro Rom.
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